miércoles, 25 de abril de 2007

Contestación al Sr. Fantasma

Estimado Fantasma, en respuesta a su escrito consecuencia de la respuesta que hago al Sr. Garcia en relación a su escrito de precampaña, y no estando de acuerdo en muchas de las afirmaciones que hace, debo responderle.
Las actividades que desarrolla la brigada de jardinería, no dependen de unas elecciones, dependen de una programación realizada de acuerdo con la temporada natural y también comprenden las zonas limítrofes como Vd. las denomina.
Las actuaciones no se hacen de prisa y corriendo, determinadas obras necesitan de un tiempo para su puesta en marcha, tiempo que viene marcado por la Ley, no por la voluntad de quien gobierna, y algo que Vd. no tiene en cuenta y que es importante es el hecho de que nuestra tarea de gobierno no empieza en julio del 2.003, de haber sido así, las obras en marcha estarían terminadas de sobras, pero empezamos en octubre del 2004 y ese tiempo produce un retraso que es el que ahora vivimos, es Vd. consciente que de no haber empezado las obras de la calle A. Roig durante el 2.006 se habría perdido la subvención de la Generalidad, de haber sido así ahora seriamos unos tontos por haberla perdido.
Inaugurar obras sin terminarlas no es cierto, se comento que el parque de los Munts se había inaugurado sin terminarlo, pero lo cierto es que una vez terminado los vecinos pidieron que se añadiera un muro y se inauguro el parque cuando estaba previsto, terminando el muro a posteriori.
Otra obra que se cuestiona su inauguración como es el pabellón, no se ha inaugurado, se ha puesto en marcha que es distinto y su uso es un bien para la gente que practica deporte, prescindiendo de actos oficiales, aparte de cuatro comentarios que tienen la importancia que tienen, la realidad es que una obra tan esperada, nadie creía que podría verla construida.
En el tema del aparcamiento estoy totalmente de acuerdo conque es un problema, pero como se soluciona? De que terrenos podemos disponer para aparcar, si anteriores gobiernos no han dejado un palmo de tierra en lo que es el centro de la población, estamos condenados a construir aparcamientos fuera de lo que es el centro y la responsabilidad de ello, a quien corresponda.
Este gobierno es poco sensible a escuchar la voz del pueblo, esa afirmación es relativa, ya se oyen voces de que la fuente tenia que estar en el centro de la plaza y de algunos que fueron los promotores de buscar firmas para que se quedara donde estaba. En cuanto a las zonas azules, la única solución para que alguna empresa construya un aparcamiento subterráneo pasa por ampliar las zonas azules, algo en lo que yo no estoy de acuerdo, pero perderemos la oportunidad de disponer de ese aparcamiento y luego será tarde.
Muntanyans II, pues si, yo no quiero formar parte de un equipo de gobierno que hipoteque Torredembarra con el pago de indemnizaciones por ese tema, infórmese de que ha pasado con Parc Sama por tener un paralelismo con Muntanyans, con la resolución judicial ha sido peor el remedio que la enfermedad.
En ningún momento he cualificado de tonto a nadie, en cambio Vd. nos cualifica de prepotentes, chulos, sordos, etc., muy feo Sr. Fantasma muy feo, esperaba más de Vd. esperaba que debatiera los temas dando la razón en donde la tenemos y mostrando su punto de vista en donde discrepa, pero no ha sido así y lo lamento.
La periferia o zonas limítrofes como las denomina, no están abandonadas, esa es su impresión pero creo que esta equivocada, la policía municipal si que pasa por las urbanizaciones, no tanto como yo querría, pero más que anteriormente.
Se han reasfaltado muchas calles de urbanizaciones y en fase de concurso publico ya se encuentran diversas calles no urbanizadas. Se han instalado parques infantiles y como mínimo adecentado zonas que eran vertederos.
Para finalizar, en mi escrito no se entona nada, simplemente manifiesto mi forma de ver la situación y que no todo el mundo esta obligado a compartirla, en cuanto a los datos son los que son, y eso no interesa debatirlo ya que son incuestionables.Quizás esperaba que diera la callada por respuesta ante un escrito que por no decir que miente, como mínimo no se ajusta a la verdad.