PLENO EXTRAORDINARIO TRANQUILO

El pasado jueves se celebro el pleno extraordinario para aprobar las ordenanzas fiscales del ayuntamiento, y fue un pleno tranquilo, con una peculiaridad, nuestro bien amado alcalde estaba afónico y no pudo hablar, el pleno lo dirigió el Sr. Ardevol, que en realidad era el padre de la criatura.
El tema en cuestión tiene una gran importancia, ya que marca lo que se tendrá que pagar el próximo año por los distintos servicios del Ayuntamiento, y dada la situación económica es para pensarse mucho lo que se tiene que votar.
El punto fundamental era el IBI, el impuesto sobre la vivienda, y el único que tuvo un debate, el resto gracias a la posición que había tomado el regidor de Hacienda, mantener tres reuniones con la oposición para debatir las ordenanzas, y aceptar casi todas las propuestas que se le presentaron.
El PSC habia propuesto que la bonificación a las familias numerosas sobre el IBI, se ajustara a un baremo según su situación económica, hace la bonificación más justa, no es lo mismo mantener una familia numerosa partiendo de un sueldo de trabajador que desde unos ingresos de 50.000€ al año, por ejemplo.
Otra propuesta del PSC aceptada fue la bonificación tanto en la tasa sobre la construcción como con el ICIO, para las personas mayores o que tengan limitaciones físicas, para poder adecuar sus viviendas a su movilidad.
El debate sobre el IBI fue interesante pero un tanto conocido y esperado. La verdadera política de izquierdas es aquella que busca la justicia fiscal, osea, que pague más quien más tiene, y a quien beneficia que se paralice la actualización del catastro, pues a quien tiene mas propiedades, no es lo mismo tener un piso a tener doce, o tener un piso y un local, que una casa y cuatro locales. A lo que tenemos que añadir que si paralizamos la actualización del catastro y quedando solo dos ejercicios, para completar la actualización, el próximo año se duplicaría la subida. y habría sido peor el remedio que la enfermedad.
Compartimos la preocupación de aquellos vecinos que están atravesando penurias económicas y no podrán pagar el IBI, nuestra propuesta es redireccionar estos casos a Bienestar Social, siempre y cuando nuestro bien amado alcalde no rebaje el presupuesto como pretendió hacer hace poco tiempo.
Otra cuestión es que se realice una buena labor de fiscalización, no puede ser que unos paguen y otros no, eso es injusto y se produce.